El esperado tren de altas prestaciones de Badajoz a Madrid de Renfe se ha estrenado esta semana con un buen número de incidencias. Averías, demoras, incluso errores de vías han jalonado la puesta en marcha de esta demandada infraestructura, que no arranca con buen pie, y lo que debía convertirse en una fecha para la celebración, ha pasado a ser un nuevo motivo de indignación para los viajeros, que denuncian que se haya puesto el servicio «a medias y sin previsión».
19 de julio. Ese era el día marcado en rojo en el calendario para la puesta en marcha del flamante tren de alta velocidad. El servicio fue inaugurado este lunes con todo el boato con un viaje de Cáceres a Badajoz, que contó con el rey Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Pero la puesta de largo del tren empezaba con un fiasco: se estrenaba con una demora de 13 minutos a su llegada a la estación de Atocha, según fuentes de Adif y Renfe
Parte de esta demora, siete minutos, se produjo al circular el tren por una vía equivocada por «un fallo humano». En el tramo inicial, entre Badajoz y Mérida, se metió por la antigua vía y no por la nueva de alta velocidad por un error, ya que ambas comparten el mismo trazado, según Renfe.
Segundo día
Las cosas no mejoraron tampoco el segundo día de funcionamiento. El Alvia con el que los extremeños iban a ganar 51 minutos de tiempo entre Badajoz y Madrid volvía a llegar tarde: entraba en la estación de Atocha con más de una hora de retraso. Para colmo, se produjeron averías en la climatización, según denunciaron los viajeros.
Los asientos renovados.
El retraso del miércoles se debió a dos cuestiones técnicas. A la salida de Badajoz, el tren se vio obligado «por necesidades de circulación a realizar una maniobra técnica para desacoplar dos de sus unidades», lo que provocó una demora de diez minutos, según fuentes del operador que recoge Efe.
No obstante, el mayor retraso fue porque «una incidencia durante el recorrido en la tracción de la locomotora limitó la velocidad del convoy»
El cúmulo de incidencias ya se ha cobrado su primera destitución: el miércoles el presidente de Renfe, Isaías Táboas, decidía el relevo del gerente de Producción de la línea Madrid-Extremadura, tras los problemas en los dos primeros días de circulación de los trenes Alvia e Intercity.
Tercer día con retrasos
El tercer día de funcionamiento del tren de altas prestaciones fue el tercer día de retrasos. El jueves registraba una nueva incidencia, que provocó una demora de unos 70 minutos.
El Alvia S-730, que por la mañana partía desde Badajoz a las 07.25 horas y que debería haber llegado a las 11.43 a Madrid, entró en la estación de Atocha a las 12.53, es decir, con 70 minutos de retraso
El Alvia de Extremadura.
El servicio volvió a registrar un nuevo problema este viernes, encadenando su cuarto día de incidencias: el Alvia que salió desde Badajoz hacia Madrid a las 7.25 horas llegó a su destino una hora y 14 minutos después de lo programado, según Efe.
A esto se suma que los trenes Alvia S-730 que han entrado en servicio en Extremadura tampoco son nuevos: han sido remodelados por Renfe en los talleres de Talgo en Las Matas (Madrid), «para mejorar su interiorismo y confort», explica el operador.
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Fuente: Hosteltur